Con pocos activos que le ganen a la inflación, resulta complejo decidir en qué invertir. Varios analistas piensan cómo armar una cartera con $1 millón y dan cuatro opciones para pensar.

El mercado de capitales es uno de los pocos refugios que tiene en el momento actual el ahorrista es inversor en un contexto en el que el plazo fijo no es una opción, ya que con una tasa del 9% pierde fuerte con la inflación del 25,5%, y el UVA exige un plazo de permanencia muy largo. En ese contexto, con casi ningún activo que le gane a ese índice con sus rendimientos, resulta complejo decidir en qué invertir su capital. Por eso, analistas ensayan, en diálogo con Ámbito cómo armar una cartera con $1 millón.

Opción 1: dólar y renta fija

"Con un millón de pesos, armaría una cartera 70-30, a favor del dólar", parte Joel Lupieri, de Epyca Consultores. Y sugiere que se podría organizar de esta forma: 70% en dólares MEP y el resto en activos de renta fija, como acciones.

En cuanto a la selección de empresas, piensa, principalmente, en las vinculadas a la evolución de las tarifas, como Metrogas (METR), Transportadoras de Gas del Sur (TGS2) y Transener (TRAN).

Opción 2: una apuesta al carry trade

Por su parte, Juan Pedro Mazza, Senior Fixed Income Strategist de Cohen Aliados Financieros, señala que "la brecha al 60% abre una oportunidad para el carry trade, por lo cual es recomendable estar parado en bonos en pesos" y detalla que hay varios factores que hacen prever que la suba del dólar perderá inercia en los próximos días:

1.  mayor el atractivo de las licitaciones del Bopreal,
2. fuerte absorción de pesos (ajuste fiscal, licitaciones del Tesoro y licuación de saldos reales),
3. el BCRA acumula dólares rápidamente y la balanza comercial de 2024 será muy positiva,
4. el Gobierno cuenta con la herramienta de subir las tasas de política monetaria.

En ese sentido, Mazza señala que, en un contexto de tasas tan bajas, es recomendable mantener posiciones cortas (menos expuestas a una suba de tasas) y apostar al bono dual TDF24 y el bono dollar-linked TV24.

Pensando en bonos más largos, recomienda el CER T2X5 y el dollar-linked TV25, que vencen a principios del año que viene y son ideales para capturar la compresión de brecha.

Opción 3: plazo fijo UVA y otros activos según perfil de riesgo

En tanto, el economista Christian Buteler prefiere diferenciar las carteras por perfil. "Un inversor conservador puede pensar en poner un 30% de su capital (en este caso $300.000) en un plazo fijo UVA, que cubre contra la inflación, y el resto lo tendría en dólares", apunta.

Esta opción de cartera que elige Buteler se fundamenta en que todas las opciones en pesos hoy tienen tasas negativas y aclara que hay que tener en cuenta que, en lo que respecta al plazo fijo UVA, se exige dejar el dinero invertido durante seis meses inmóvil.

Por otro lado, para un perfil más arriesgado, considera que se puede poner un 20% (unos $200.000) en un plazo fijo UVA y el resto, una parte en acciones locales, un 10% en bonos, apostando a una eventual estabilización y crecimiento de la Argentina, y dejar un porcentaje para invertir en Cedears.

Aunque advierte que hay que tener en cuenta, a la hora de pensar en acciones de empresas en el exterior, que hay que buscar firmas "que sean seguras porque es una cobertura contra el riesgo local y la devaluación, que puede perder valor si el empeora el panorama externo".

Opción 4: para un inversor moderado/agresivo

Y, finalmente, la economista Elena Alonso señala que una cartera con $1 millón para un inversor que tienda a moderad/agresivo la distribuiría así:

• un 50% en obligaciones negociables que sigan al dólar, como YPF, Edenor y Pampa Energía;
• un 30% de Cedears, con foco en tecnológicas (como Apple, Google, Mercado Libre y Microsoft);
• 10% en bonos AL30 y
• 10% en dólar MEP, "como para tener liquidez".

Armar la cartera perfecta no es fácil ni es la misma para todos

Las alternativas son varias y lo importante es tener en cuenta el nivel de conocimiento que cada uno tenga del mercado de capitales y qué grado de riesgo se está dispuesto a asumir a la hora de pensar las inversiones que se van a realizar. El asesoramiento es siempre necesario, pero es bueno escuchar y leer a los distintos analistas para tomar decisiones basadas en el conocimiento.